domingo, 3 de noviembre de 2013

Artesanal versus Industrial

Las cervezas elaboradas usando métodos artesanales (eso no quiere decir que no intervengan procesos mecánicos) poseen características que las diferencian de las comerciales o industriales.

Estas últimas suelen tener un mismo sabor, un mismo color y hasta los mismos grados de alcohol. Son cervezas diseñadas para un perfil de consumidor amplio, por lo que se busca un producto estándar que pueda satisfacer todos los gustos. Lo único que las diferencia entre ellas es el precio.

Sin embargo, las cervezas realizadas siguiendo procesos artesanales ofrecen muchas más variedades en color, olor y sabor. Sus niveles de alcohol pueden ir de los 3 grados hasta los 10, por ejemplo. El gas que contienen se ha generado en la propia botella gracias a un proceso secundario de fermentación, similar a como se produce con el cava o el champagne. Cuando son decantadas, producen una espuma que persiste en el vaso hasta el último trago. En las industriales, dicho gas se consigue inyectando en la bebida agua carbonatada.

Pero el principal inconveniente de las artesanas es su precio. Al no poder realizar grandes tiradas, la rentabilidad de cada botella es menor, siendo sus precios en algunos casos un poco prohibitivos.

De todos modos, tanto artesanales como industriales, la cerveza es una gran bebida para tomar en compañía.

Aquí os dejo un vídeo en el que realizo una pequeña comparación entre una cerveza industrial y una artesanal que produje a principios de verano a partir de extracto de malta.